Motricidad en Educación Infantil

Hola chic@s:

Llegó la hora de la despedida.
Recuerdo cuando empecé a escribir este blog hace unos pocos meses. No sabía ni por donde empezar: me daba vergüenza escribir, me costaba un montón expresar lo que me producían las viñetas, mis sentimientos en las clases...
Poquito a poco fui soltándome, empecé a ser más crítica, a darme cuenta de que muchas de las cosas que hacemos a menudo no son correctas, cómo podemos solucionarlas...
El resultado es que a día de hoy el blog se ha convertido para mí en un espacio donde puedo expresar lo que siento, donde puedo comparar mis ideas con mis compañeros/as...

Como he dicho en varias ocasiones esta asignatura ha sido toda una sorpresa para mí.
Me acuerdo que el primer día de clase estaba bastante nerviosa ya que el hecho de que la asignatura tuviera que ver con actividades de movimiento, juegos y cosas similares no me gustaba nada.
Aunque reconozco que me ha costado bastante y que en numerosas ocasiones pensé en escaquearme de las clases prácticas, poner cualquier excusa para saltármelas...al final he acabado disfrutándolas realmente.
En las primeras clases tuve claro, por el clima que se estableció, por la manera de impartir la asignatura, que esta vez no iba a ser como siempre, que esta vez realmente me tenía que comprometer con este proyecto. La verdad es que así ha sido: algunas cosas las podré hacer mejor, otras peor, pero lo que sí tengo claro es el compromiso que he tenido con la asignatura.
Poco a poco en las clases prácticas fui colaborando, fui tomándomelas con más calma, me empezaron a gustar más...Así hasta que al final, el último día de clase, sorprendentemente para mí, me dio pena despedirme de las prácticas, de hacer juegos, de reírme, de organizar actividades con mis compañeras...
Como dije en la autoevaluación, ésta ha sido mi mayor recompensa. A partir de ahora creo que dejaré de renunciar a campamentos, a actividades, a excursiones...por el simple hecho de llevar inclúidas actividades deportivas.
Evidentemente no me voy a convertir ahora en deportista profesional, ni mucho menos. Pero sí que veo que ahora no me da tanto miedo correr con mis compañeras, o jugar con una pelota, aunque no se me de bien: el caso es divertirse un rato y participar en actividades colectivas.

Como he dicho al principio de este blog también he aprendido a ser bastante crítica gracias a esta asignatura. Antes me resultaba imposible dar mi opinión sobre algo, y mucho menos contradecir la opinión de alguien, aunque fuera con el máximo respeto. Ahora me tomo esto con mucha más naturalidad, y creo que me servirá bastante en el futuro.

También he aprendido con esta asignatura el valor que tiene la motricidad en educación infantil, y en todos los niveles en general. No podemos comenter los mismo errores que algunos maestros cometieron con nosotros. La educación infantil no puede ser sólo aprender los números y los meses del año entre otras cosas. Debemos proporcionar a los niños una buena educación motriz, darles ayuda si tienen algún problema, actuar para que se desarrollen correctamente, porque lo que está claro es que de no hacerlo así en un futuro las consecuencias negativas saldrán a la luz.

Por último agradecer a mis compañeras y a la profesora la implicación, mayor o menor, en este proyecto, ya que ha sido una manera totalmente diferente de trabajar.
Con otras asignaturas los profesores, en general, se han basado en explicar unos contenidos y que nosotros hiciéramos preguntas sobre nuestras dudas, algunos ni siquiera eso.
Sin embargo aquí, en mi opinión, hemos construído la asignatura entre todos: hemos tenido que inventar actividades, plantear debates, dar nuestra opinión sobre distintas cosas, investigar sobre algunos aspectos, e incluso, al final, dar nuestras propias clases.
Creo que esto es algo bastante beneficioso para nosotras, ya que se nos considera de alguna manera como futuras compañeras y no sólo como simples alumnas.
El hecho de que se nos haya dejado participar creo que ha hecho que nos impliquemos de una manera muy positiva en la asignatura.
En resumen, en mi opinión ha sido una experiencia muy formativa, positiva y a la vez divertida.

Hola chic@s:
Vamos a comentar la última viñeta de este bloque, y también de esta asignatura.

En esta viñeta se observa como una maestra/o pide a un alumno que lea su redacción. El alumno empieza a leer y en un determinado momento se equivoca en una palabra.
El docente se cabrea muchísimo y echa una reprimenda al alumno: le dice que es un burro y que se calle y aprenda a escribir.
En mi opinión el burro aquí es el maestro o maestra, y el que se debería callar es él/ella.

No puede ser que mandemos una tarea a un alumno, que éste se esfuerce por hacerla, que la traiga el día acordado, que la haga con toda su buena intención, y que el maestro le regañe por tener un fallo.
Si hacemos esto para empezar no estamos valorando el esfuerzo, sino el resultado, y para terminar estamos valorando el trabajo palabra por palabra, no de una manera global.
En el caso de este niño, a lo mejor se ha esforzado muchísimo a la hora de hacer la redacción, o a lo mejor la redacción era buenísima y el torpe maestro no ha sabido valorar su trabajo.

El hecho de regañar a los niños por cualquier tontería es muy perjudicial.
Si yo fuera ese niño me lo pensaría dos veces a la hora de volver a hacer los deberes, y más si se tienen que leer en público, porque en este caso no sólo se ha tirado por tierra el trabajo del alumno, sino que también se lo ha puesto en evidencia delante de sus compañeros.
Seguro que todos o casi todos hemos tenido, desgraciadamente, algún profesor que nos ha humillado, que nos ha menospreciado, que no ha valorado en ningún momento nuestro esfuerzo...
El hecho de actuar así tiene unas claras consecuencias: la frustación del alumno, su desmotivación, el odio a esas clases determinadas, a ese profesor, el deterioro de su autoestima...

En resumen, creo que no se puede estar midiendo y observando todo con lupa. Si pedimos a los niños que hagan una tarea, sobre todo cuando son más pequeños, debemos medir sobre todo el interés, la implicación, el esfuerzo empleado..., y no tanto el resultado, y más de manera tan precisa.
Si nos lo tomamos todo de una manera tan estricta y echamos una bronca al niño por cualquier tontería lo único que podemos conseguir es que el niño acabe odiando la asignatura o hacer los deberes, ya que pensará que haga lo que haga, siempre estará mal a los ojos del maestro.

¿Qué opináis vosotr@s?

Hola chic@s:
Vamos a comentar la séptima viñeta de este bloque.

En esta viñeta se puede observar cómo unos reporteros llegan a una clase de infantil para hacer un reportaje, una entrevista o algo similar.
Los reporteros le dicen a la maestra que no se preocupe, que actué con naturalidad, como si ellos no estuviesen.
La verdad es que actuar con naturalidad cuando tienes a unas personas grabándote, observando lo que haces debe ser un poco complicado.
Con el trabajo de investigación, mi grupo ha tenido que hacer observaciones en clases de infantil.
Lo primero que dijimos a las maestras es que no cambiaran su ritmo de clase, que actuaran como siempre.
No se si lo intentaron o no, pero me parece a mí que es una tarea un tanto complicada, ya no sólo por la maestra, sino también por los niños.
Los niños pequeños tienen establecidas unas ciertas rutinas, y cuando se las cambiamos, por la razón que sea, los mareamos.
Cuando fui a observar la clase los niños estaban inquietos, no paraban de preguntarme quién era, si iba a venir más, por qué me iba, qué estaba apuntando, qué hacía allí, si eran una nueva seño...
La maestra me comentó que al día siguiente los niños estuvieron preguntándole por qué no estaba en clase.
Esto ocurre por lo que he dicho antes: los niños tan pequeños tienen establecidas unas ciertas rutinas.
No sólo en clase sino en todos los sitios y con todos los aspectos: saben cuándo van a jugar, a qué parque van, cuándo cenan, cuándo se acuestan, cuándo ven los dibujos...
Por todo esto me parece que a estas edades es muy recomendable respetarles sus rutinas.
Evidentemente no pasa nada si un día se las rompemos, sea donde sea, pero no debemos tomar esto como un hábito, ya que no es beneficioso para ellos.

Por otra parte, aunque los reporteros digan a la maestra que actúe con naturalidad, la maestra probablemente cambiará su manera de enseñar.
Cuando nosotros fuimos al colegio la maestra empezó a introducir cosas nuevas para que nosotros lo viéramos. Notamos esto porque los niños no paraban de preguntar por qué hacían esas cosas, cuándo iba a venir la hora de jugar o hacer plastilina...
Creo que al menos en España la clase es concebida como algo personal de la maestra con sus alumnos.
En otros países las clases son más abiertas, los otros profesores pueden opinar, los padres pueden entrar y opinar...
Pero aquí, aunque se considera la colaboración de la familia fundamental, numerosos maestros consideran que su clase en eso: su clase. Se molestan si alguien les dice que deberían cambiar algo, que podrían utilizar otros recursos, que algo no lo están haciendo bien...
En mi opinión, el hecho de que una clase sea abierta tiene, como casi todo, sus ventajas y sus inconvenientes.
Es bastante bueno que la tarea de enseñar sea una tarea compartida entre profesores, alumnos y familias. Pero también es verdad que se debe saber colaborar, ya que si cada uno opina una cosa, los padres restan credibilidad a los maestros..., la situación se podría convertir en un caos.

En resumen, creo que es importante respetar las rutinas de los niños en la escuela. También considero que la clase es un espacio bastante íntimo entre maestro-alumnos, en el que aunque se pueda colaborar, la tarea fundamental en ese espacio depende de la maestra y de los alumnos.

¿Qué opináis vosotr@s?

Hola chic@s:
Vamos a comentar la viñeta seis de este bloque.

Hola de nuevo chic@s:

Vamos a comentar lo que hicimos en las clases de ayer. Ayer ya no tuvimos seminario de prácticas. Todas las horas estuvieron dedicadas a la exposición de los trabajos de los distintos grupos.
Los temas que se expusieron fueron varios: la motricidad en las aulas, los juguetes en las diferentes generaciones, los juegos en las distintas épocas, los juguetes del mundo, la dispacidad, el sexismo existente en muchos aspectos como los juguetes y la publicidad...
La verdad es que fue un día interesante ya que nos pudimos enterar de bastantes cosas con respecto a todos los trabajos.
Quizás lo único negativo fue la cantidad de trabajos presentados en un mismo día. Al final creo que muchos de nosotros estábamos un poco "saturados". Evidentemente no se podía hacer otra cosa por la falta de tiempo.
Otra cosa que eché en falta, también por falta de tiempo, es no poder hacer comentarios sobre los trabajos. En muchos de ellos me hubiera gustado que hubiéramos comentado cosas para que nos pudiésemos enterar de la investigación de nuestros compañeros/as.
Como he dicho antes, la falta de tiempo no lo permitía.
En general, como comenté al principio, fue un día bastante interesante.
Ya sólo nos queda la autoevaluación, que se hará el miércoles de la semana que viene. Las clases "normales" llegaron a su fin.

Hola a tod@s:
Hoy vamos a comentar la quinta viñeta de este bloque

En mi opinión el asistir a colegios "especiales" tiene sus ventajas y sus inconvenientes.
Como comenté en una viñeta anterior, he estado trabajando en varias ocasiones con personas con distintas discapacidades. Hablando con muchos padres me comentaron, bastantes de ellos, que sinceramente preferían que su hijo estuviese en un colegio especial en lugar de en uno ordinario.
Su justificación era que en los colegios ordinarios no había suficientes recursos para trabajar con estos niños, que las elevadas ratios hacían que los maestros no prestaran atención a sus hijos, que muchas veces sus hijos estaban aislados de todos los demás...
Yo creo que la integración de estos niños con otros es muy positiva, pero también dependiendo del grado de dificultad que se presente.
Me explico: no es lo mismo integrar a un niño sordo, ciego o con síndrome de down moderado en un colegio que integrar a otro con alguna patología grave, que hace muy complicada su integración real.
En el caso de estos últimos niños la integración sería favorable si se contaran con los medios adecuados, como por ejemplo tener una cuidadora a parte de su maestra, hacer actividades que pudieran asumir...
Desgraciadamente, supongo que por falta de medios (no se si económicos o de cualquier otro tipo) esto no se produce siempre.
En resumen, creo que la integración de los niños con dificultades es muy positiva para tod@s, no sólo para estos niños sino para los demás. No nos podemos olvidar que este tipo de convivencia hace que los niños aprendan que no todos somos iguales, que todos tenemos derecho a divertirnos, a pasárnoslo bien...
Quizás de este manera, en un futuro, estos niños aprendan a respetar a los demás, con dificultades o no.

Hola chic@s:
Hoy vamos a comentar la cuarta viñeta de este bloque.

En esta imagen se puede ver a un niño llegando al colegio. En ese momento piensa en una playa con un perro, árboles... La maestra lo saluda al verlo entrar. Su pensamiento: 25+ 1 más.
Como podemos comprobar los pensamientos de uno y otro son completamente diferentes.
El niño llega a la escuela pensando en lo bien que se lo va a pasar. Saluda a la maestra, que para ella es una persona importante. Sin embargo, la maestra al verlo lo único que parece pensar es en que ha llegado uno más de sus alumnos.
Esta situación me parece bastante triste, y también común en algunos casos.
Cada vez se ven más docentes que se implican lo mínimo con sus alumn@s.
Su tarea consiste en llegar a clase, dar las lecciones que toquen, corregir ejercicios si es que hay, hacer los papeleos que hagan falta e irse a su casa. La labor del magisterio se ve reducida a esto.
Yo siempre he pensado que ser maestr@ era algo más que dar una lección o las que toquen e irse a casa. Un maestro debe ser una persona que se implique con sus alumnos, al que le entusiasme verlos progresar y aprender, que colabore con las familias para conseguir lo máximo de sus alumnos...
Sin embargo, si para éste/a los alumnos son todos iguales, son simples números, no se preocupa por ellos, no se implica en absoluto...nos encontramos con una gran dificultad.
Aunque parezca una tontería los alumnos siempre notamos cuando un maestro/profesor se implica más o menos. No es lo mismo tener un profesor que se preocupa por tí, que te intenta ayudar cuando tienes un problema, que te ofrece distintas alternativas ante cualquier situación...que uno que "pasa" absolutamente de tí.
Puede ser que saques la misma nota con un profesor u otro, pero seguramente no vas a aprender lo mismo ni vas a guardar el mismo recuerdo de uno que de otro.
Si a todos nos hicieran una pregunta sobre nuestros profesores favoritos casi todos nos acordaríamos de aquellos que intentaron hacer las clases amenas, que se precuparon por nosotros, que nos ayudaron...
Si nos preguntaran, por otro lado, cuáles han sido nuestros peores profesores seguro que nos vendrían a la mente aquellos que no mostraban interés por nosotros, que sólo estaban interesados en cobrar un sueldo y poco más.
En resumen, creo que la implicación de un docente con sus alumnos es un aspecto fundamental, de los más importantes. Si se muestra interés por los alumnos seguro que ellos responderán de una manera muy positiva.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola chic@s:
Hoy vamos a comentar lo que hicimos en las clases del miércoles.
En la clase teórica África nos estuvo explicando un poco los beneficios del judo. Nos puso varios videos donde se veían distintos ejercicios. Éstos eran realizados por niños de todas las edades, desde los más pequeños hasta más grandes. En los videos se veían los distintos circuitos de calentamiento que realizaban, donde se incluían volteretas, desplazamientos variados, saltos...
Después de la intervención de África llegó la de otra compañera, Sara. Ella nos explicó distintos masajes infantiles muy beneficiosos para los niños: en cara, piernas, brazos, espalda...Todos estos ejercicios los llevamos a la práctica por parejas en la clase práctica.
Una cosa que comentamos a raíz de la intervención  de Sara es que siempre hay que comentar las actividades que vamos a realizar con los padres, para que no haya ningún tipo de problemas. No nos podemos olvidar que hay ciertos temas muy presentes en la actualidad que pueden causar conflictos y dar lugar a acusaciones erróneas.
Después de la intervención de las compañeras, la profesora nos explicó distintas cosas relacionadas con la expresión corporal. Estuvimos hablando del juego simbólico, del juego dramático, del escénico...
La clase práctica estaba dedicada, precisamente, a la expresión corporal.
Lo primero que tengo que decir es que fue una de las clases prácticas que más me gustó.
Primero hicimos danza, como suele ser habitual en los inicios de clase.
Al acabar esto hicimos los distintos masajes planteados por Sara. Fue una actividad diferente pero muy interesante, aunque a más de una nos entraran bastantes cosquillas en muchas ocasiones.
Después nos dividimos en grupos de 10 personas.
La profesora nos puso un video del mago de los sueños donde se veía a una niña contando el cuento de Caperucita Roja. Después cada equipo tenía que representar un cuento y aquí vino la parte más divertida de la sesión. Cada grupo representó el cuento a su manera, incluso algunas compañeras utilizaron un cuento diferente. Se vieron cosas realmente divertidas y creo que, en general, todas disfrutamos mucho con esta actividad.
Después de esto, también por grupos, nos tuvimos que inventar una pesadilla de lo más absurda y representarla ante nuestros compañeros sin utilizar la voz, sólo con gestos y expresiones. Las pesadillas fueron de lo más variadas: quedarse desnudo por la calle, quedarse pegado en el suelo, ser pelotas humanas...
En resumen, fue una clase realmente divertida. El problema es que era la última y se quedaron demasiadas cosas sin hacer. Es lo que tiene tener dos horas teóricas y una y media práctica a la semana en una asignatura que es fundamentalmente práctica.
En fin, que le vamos a hacer. Hay que pensar en positivo. Aunque se hayan quedado bastantes cosas sin ver y las prácticas podrían haber dado mucho más de sí seguro que cada una de nosotr@s se lleva bastantes aprendizajes; la que no se ha quedado con un juego se ha quedado con otro, o si no con una danza. Supongo que eso es lo realmente importante.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola chic@s:
Vamos a comentar la viñeta del día:

En esta imagen se puede ver como una maestra/o de infantil le dice a sus alumnos que le traigan pinzas al día siguiente. Los niños se van a casa ilusionados pensando en la cantidad de cosas que van a hacer con éstas. Sin embargo, la única cosa que van a hacer es un portaplumas para su padre.

Nuevamente nos encontramos con un conflicto de intereses entre maestra-alumnos. A los niños les gustan algunas cosas, a la maestra otras; los niños conciben la educación infantil de una manera, la maestra de otra completamente diferente.
Por otra parte en la viñeta también se observa la falta de originalidad que se da en muchos colegios actualmente. Seguro que muchos de nosotros hemos hecho este ejercicio alguna vez, o parecidos: ceniceros para el día del padre, flores para el de la madre, marcos para poner nuestras fotos...
Me surgen entonces varias preguntas:

1.- ¿Es que no se pueden hacer más cosas con pinzas, palos de polo o similares? Por supuesto que sí, pero como he dicho varias veces da la sensación de que en educación infantil, como en otros niveles, hay muchas maestras/os acomodadados, que no se molestan en buscar recursos diferentes para sus alumnos.
2.- Si le decimos al niño lo que tiene que hacer, ¿dónde dejamos la creatividad? La dejamos en el "fondo del mar". La creatividad, aspecto fundamental, no parece importar demasiado en la escuela. Parece que lo realmente importante es hacer niños iguales. La diferencia no suele gustar. Las vacas son blancas y negras, y punto.
3.- ¿No sería mejor que cada niño hiciera lo que quisiese para su padre o madre? Así, entre otras cosas, se demostraría lo que cada niño conoce a sus progenitores. Pero no, se siguen haciendo una y otra vez los mismos regalos y las mismas manualidades. Creo que se podría hacer un museo nacional, espero que no internacional, con los regalos de los niños hacia sus padres/madres.

En fin, con esta viñeta, al igual que con muchas otras, voy aprendiendo las cosas que no debería hacer. Espero que el día de mañana me "caliente" realmente la cabeza a la hora de buscar recursos para trabajar con mis alumnos. Lo primero que se debería hacer es preguntarles lo que les apetece hacer. No tiene demasiado sentido estar todo el día haciendo cosas que no les interesan ni lo más mínimo.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola chic@s:
Vamos a comentar la segunda viñeta del bloque 3.

Como se puede ver en la imagen, una maestra está con sus alumnos en el bosque. La maestra explica a los niños/as los árboles: las partes que tienen, cómo son... Lo más curioso de esta situación es que la maestra está explicando los árboles utilizando un dibujo en una pizarra, cuando tiene un montón de árboles reales justo detrás de ella.
Tras ver esto sólo me puedo hacer dos preguntas: ¿Estamos loc@s? o ¿Nos estamos quedando tont@s?
Realmente me resulta muy complicado entender lo que hace la maestra. Si se tienen árboles al lado, ¿por qué no levantarse del suelo y decirle a los niños que se acerquen a un árbol? Allí les podría explicar qué es el tronco, cómo es, dónde están las raíces, cómo se llama la parte arriba, que los árboles tienen diferentes alturas y muchísimas cosas más. Sin embargo se prefiere utilizar una pizarra, un recurso del que los niños/as están más que cansados.
Luego nos extraña a todos cuando vemos a un niño/a que no sabe de dónde viene la leche, o cómo es un pollo. Nos echamos todos las manos a la cabeza y nos preguntamos cómo es posible que pasen estas cosas. Pues estas cosas pasan, entre otros factores, por esto.
En la educación infantil muchas maestras/os se están acomodando al sistema de fichas, a cuatro juegos y poco más. De vez en cuando se puede hacer alguna salida, pero si se aprovecha de la manera en que lo está haciendo esta maestra, mejor quedarse en clase.
A los niños se les muestra todo en fotos, dibujos...cuando muchas veces lo tienen en la propia calle.
Por ejemplo, para observar un árbol no tienen que ir al bosque, hay muchos en cualquier calle. ¿Tanto trabajo cuesta enseñárselos a los niños en vivo y en directo?
Lo mismo pasa cuando hablamos a los niños de distintos alimentos: la leche, el pollo, los cereales...
Lo más idoneo sería llevar a los niños a una granja escuela, donde vieran lo que es una vaca, un gallo, una gallina, unos pollos, patos... Si no se puede, al explicar a los niños que la leche es muy necesaria deberíamos decirles que se obtiene de animales, como la cabra, la oveja o la vaca. Lo mismo deberíamos hacer con los pollos. Les podríamos enseñar fotos, dibujárselos...
Si no hacemos esto los niños podrán llegar a pensar que los pollos vienen del Mercadona, la leche de los tetrabriks o los cereales que comen todos los días los recogen así de algún lado y los meten en una caja.
En resumen, más vale que nos espabilemos y utilicemos los recursos naturales que tenemos a nuestra mano para enseñar a los niños determinadas cosas. Si seguimos de esta manera, los niños dentro de unos años tendrán mínimos conocimientos de las cosas que hay en su entorno, área importante en el Currículum oficial de infantil.

¿Qué opináis vosotr@s?

Hola chic@s:
Hoy vamos a comentar lo que hicimos en las clases de ayer.
En primer lugar, como he comentado en la viñeta anterior, dos compañeras nos presentaron el proyecto de La carta a la Tierra.
Después de esto estuvimos hablando de la educación temporal. Los días anteriores tratamos temas como el esquema corporal, el tono, la respiración, la orientación espacial... Hoy tocaba la temporalidad.
Los niños cuando son pequeños no tienen demasiada noción del concepto de tiempo. Para ellos 5 minutos pueden convertirse en 2 horas, y más si lo que están haciendo no les hace demasiada gracia.
Hemos comentado qué podemos hacer para trabajar la temporalidad, que hay que dejar que los niños tengan su propio tiempo...
Después de esta sesión hemos tenido una clase práctica más larga de lo habitual, ya que la semana anterior no tuvimos esta clase.
La práctica de hoy me ha gustado mucho. Además, hemos trabajado distintos ejercicios para niños de 0 a 3 años, algo que no ha sido muy común en las anteriores clases, en las que hemos trabajado más en orientación al segundo ciclo de infantil.
En primer lugar hemos trabajado dos danzas bastante sencillitas, en las que no sólo se trabajaba el tiempo, sino los distintos desplazamientos...
Después de esto hemos hecho distintas actividades, algunas en gran grupo y otras por parejas.
Los ejercicios han sido muy variados: desde andar por las líneas del pabellón utilizando distintos apoyos del pie, hasta andar muy despacio dando pasos pequeños o grandes. En parejas hemos trabajado con pelotas, pañuelos...
Los ejercicios eran tirar la pelota a tu compañero para que tenga que calcular el tiempo que va a tardar y cogerla, hacer cosas mientras tiras una pelota o un pañuelo, calcular los pasos, palmos, segundos que hay de una sitio a otro...
Por último hemos hecho unas actividades de respiración y relajación, algo que no habíamos hecho hasta ahora.
Por parejas nos hemos ido dando masajes utilizando las pelotas, hemos movido las piernas del compañero mientras estábamos relajados...
En fin, ha sido una clase muy divertida. Lo malo es que las prácticas llegan prácticamente a su fin.
Como ha dicho la profesora, no se entiende que en esta asignatura haya más teoría que prácticas.
Tampoco se entiende que estas asignaturas, que son fundamentales para nosotras a la hora de trabajar con los niños/as en un futuro tengan esta duración tan corta y se les de tan poca importancia.

¿Qué opináis vosotr@s?

Hola a tod@s:

Ayer tratamos en clase un tema muy interesante.
Dos compañeras (Sonia y Elena) nos presentaron un proyecto muy bonito: La carta a la Tierra. Este proyecto es una declaración internacional de principios y propuestas para vivir de una manera sostenible y solidaria, es decir, para dejar de "tratar" horrorosamente mal a nuestro planeta.
Me parece fundamental el hecho de que se trabajen estas cosas desde que los niños son pequeños.
Para ello, los docentes o futuros docentes debemos concienciarnos de las cosas que tenemos que fortalecer o eliminar en las aulas. No puede ser que un maestro/ a no le diga nada a sus alumnos por tirar las cosas al suelo o por dejar el grifo del baño abierto.
No nos olvidemos que los niños, a estas edades, son como esponjas. Imitan todo aquello que ven de las personas a las que ven todos los días, personas a las que tienen aprecio...
Si su padre, madre, maestra, tío... tira las cosas al suelo, no respeta el medio ambiente, ellos imitarán estas conductas. Puede ser que en la familia no se respete el medio ambiente, pero desde la escuela debemos crear buenos hábitos en este sentido. Debemos trabajar día a día el respeto hacia el medio ambiente.
Creo que la educación en valores debe ser uno de los objetivos primordiales en educación infantil.
La enseñanza infantil no está sólo para hacer fichas o actividades lúdicas de números o letras.
Podemos y debemos introducir poco a poco a los niños la educación en valores: el respeto al medio ambiente, el no sexismo, la prevención de conductas violentas, la adquisición de hábitos saludables...
De hacerlo así, puede que consigamos que esa generación no repita los errores de esta: el deterioro de medioambiente mundial, la violencia doméstica, el machismo...
Como siempre digo el camino es largo, pero no por ello nos debemos desesperar y no actuar.

Hola chic@s:
Empezamos un nuevo bloque de viñetas.

En la imagen nos encontramos a un niño y su maestra. El niño llega a la escuela pensando en perros, barcos, coches, pelotas... Los pensamientos de la maestra son, sin emgargo, totalmente contrarios: letras, números, caligrafía...
Esta situación es, desgraciadamente, bastante corriente. Los niños llegan a la escuela entusiasmados, con unos pensamientos de que la escuela es divertida, van a conocer a muchos niños, van a hacer muchas actividades divertidas, van a poder jugar... Sin embargo, cada vez más se prefiere que los niños hagan trabajos intelectuales como fichas. Se resta importancia, por lo tanto, al juego, al desarrollo de la fantasía y creatividad de los niños, a la relación de unos niños con otros...
Esta situación no es extraña en el tiempo que vivimos. Cada vez consideramos a los niños menos niños.
Hace bastantes años los niños eran considerados adultos pequeños. Se les regañaba cuando se les tenía que regañar, trabajaban si su familia tenía necesidades...
Después la situación cambió a mejor, y los niños empezaron a actuar verdaderamente como niños: se les consideraba inocentes, se les permitían algunas travesuras por eso de que los niños son así, empezó la escolarización masiva...
La situación actal es un poco complicada. Por un lado nos encontramos a niños excesivamente sobreprotegidos; por otro, a los niños se les pide cada vez más, y esto se traslada a la escuela.
Cada vez se tienen menos en cuenta los intereses de los niños en las escuelas, salvo raras excepciones.
En muchísimos colegios se atiborra a los niños a hacer fichas: 4o 5 diarias. La explicación que se da por parte del colegio y las maestras es que los niños necesitan aprender, que la enseñanza infantil no va a ser todo el rato jugar y jugar.
Evidentemente no se puede estar todo el día jugando, pero tampoco poner a un niño a hacer deberes durante 3 horas.
Cuando hacemos esto estamos "robando" en cierta parte la infancia del niño. Yo recuerdo que cuando era pequeña y estaba en infantil hacía pocos trabajos intelectuales, y por supuesto no tenía nunca deberes para hacer en casa. Después todos tenemos unos cuantos años, demasiados, para que los maestros y profesores nos atiborren a deberes, trabajos y exámenes.
Sería conveniente que, por lo menos en la enseñanza de infantil, libráramos a los niños de estas tareas.
Como he expresado antes, no estoy diciendo que el niño vaya a la escuela para tirarse 5 horas jugando, para eso no tendría sentido la escuela. Lo único que digo es que se podrían tener un poco más en cuenta los intereses de los niños, preguntarles qué quieren hacer, cuál es el tema que quieren trabajar, pedirles su opinión a la hora de hacer algunas actividades.
Si la escuela de infantil consiste en hacer fichas para aprender los números, letras, saber escribir papá y mamá, y con eso creemos que hemos logrado nuestro objetivo, mal vamos, muy mal.

¿Qué opináis vosotr@s?

Hola de nuevo:Hoy vamos a comentar lo que hicimos en la clase del viernes.
En esta clase, distintos grupos estuvimos exponiendo la lectura que nos había mandado la profesora: el juego tradicional en la socialización de los niños.
La verdad es que esta clase me gustó mucho porque nosotras mismas hicimos la clase, planteamos dudas, las resolvimos...
Otra de las cosas que más me gustó es que la lectura era escrita por la profesora. Normalmente no estamos acostumbrados a leer cosas de los profesores de la universidad. Mucho menos estos nos dicen que tenemos que criticar (constructivamente) lo que han escrito, diciendo las cosas que nos parecen bien y las que no tanto.
Creo que hacer esto es importante porque debemos desarrollar poco a poco nuestra visión crítica.
Cuando tienes que criticar o comentar el trabajo hecho por un profesor lo primero que te preguntas es cómo lo vas a hacer, cómo le sentará si dices que algo no te ha gustado...
Hay profesores a los que no les gusta nada que critiques su trabajo, y ese era en parte nuestro temor
Afortunadamente esto no pasó en clase. La profesora aceptó las cosas con las que no estábamos muy de acuerdo, nos explicó cosas de la lectura...
Creo que estas cosas se deberían hacer más a menudo en estos niveles.
Estar en la facultad no consiste en estudiar y hacer exámenes solamente. Dentro de unos años seremos maestras y debemos aprender lo máximo posible, coger todos los consejos que podamos de los profesores, desarrollarnos críticamente...

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola chic@s:Hoy vamos a comentar la última viñeta de este bloque.

Como se puede ver en la imagen, un niño está en un balcón o terraza montado en una bici. Un adulto le dice que tiene mucha suerte por tener una terraza en su casa, que hay muchos niños que no la tienen y deben jugar en la calle.
Lo primero que me he preguntado al ver esta viñeta ha sido: ¿eso es tener suerte?
Lo digo porque no consiste en tener una terraza enorme (si es que a eso se le puede llamar enorme) o un patio o lo que sea. Los niños deben jugar la mayor parte del tiempo con otros niños, y en algunos casos con adultos.
Uno de los papeles más importantes del juego es la socialización que implica. Cuando un niño juega con otros niños, establecen normas, quién juega y quién no juega, expresan sentimientos, liberan tensiones...
Pero si dejamos todo el día a un niño sólo en la terraza montado en una bici, ¿para qué le sirve esto?
No estoy en contra de que los niños tengan ratos de soledad. Un rato no pasa nada, y todos necesitamos nuestro espacio de vez en cuando. Pero de ahí a dejarlo en una terraza arriba y abajo hay un gran paso.
Si encima el adulto en cuestión le dice que tiene mucha suerte, la historia es para echarse a llorar.
Esta situación que se nos muestra, desgraciadamente no es tan poco frecuente. Muchos padres, por falta de tiempo, ganas o lo que sea no salen a menudo con sus hijos.
A veces te encuentras con niños que raramente saben lo que es un parque. Sus padres compensan esto teniendo un enorme jardín en su casa. Como he dicho antes poca utilidad tiene esto, ya que estás quitando al niño la parte más importante del asunto: la relación con sus iguales.
A veces hay padres demasiado ocupados pensando en su trabajo, en la cantidad de cosas que tienen que hacer...y no se dan cuenta que el niño, aunque sea niño también tiene sus necesidades, y una de ellas es pasar un tiempo relacionándose con los demás. La falta de esto no se arregla comprándole miles de juguetes o teniendo 3 casas con enormes jardines.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola de nuevo:
Vamos a comentar lo que hemos hecho en la clase de hoy.
Al principio hemos hablado un poco de nuestro trabajo individual.
Después hemos seguido hablando de los valores de los juegos. Hoy hemos hablado sobre todo del racismo.
Lo que más me ha preocupado de este asunto es la opinión de algunos maestros y maestras. Me explico: que un niño/a sea racista, o su familia, me parece grave, pero que su maestra, que los está formando y educando en multitud de cosas lo sea me parece muchísimo peor.
Si una maestra es racista, ¿qué le va a enseñar a unos niños? Cuando llegue un niño inmigrante a clase y esa maestra muestre desprecio hacia él, ¿qué harán los niños? Ya sabemos que los niños muchas veces imitan conductas de los adultos a los que tienen más aprecio.
También hemos estado comentando que desde la escuela, desde las aulas se pueden intentar modificar conductas que vienen de las casas de los niños. Si la familia de un niño tiene una determinada manera de pensar (es racista, machista...) desde la escuela las maestras y maestros deben intentar modificar esa manera de pensar. Deberían empezar hablando con la familia, y si no se llega a un acuerdo tomar otras medidas.

Después de esto hemos seguido hablando de factores motrices como la corporalidad. Hemos hablado un poco del tono, de la respiración, relajación, lateralidad...
Y esto ha sido todo por hoy: una clase bastante interesante, sobre todo por el tema del racismo, todavía demasiado presente en nuestra sociedad.

Hola chic@s:
Hoy vamos a comentar la penúltima viñeta de este bloque:

Bueno, para empezar tengo que decir que esta viñeta me ha costado bastante comprenderla, y no sé exactamente qué es lo que quiere reflejar.
Como se puede apreciar en la imagen, dos niños, o un niño y una niña, están jugando detrás de un cartel que simula ser un coche. Parece que están jugando a las cocinitas o a papás y mamás.
Tras ver esta viñeta se me han planteado dos posibilidades de reflexión:

1.- Que los niños hacen un coche para que los demás no vean que están jugando. Quizás lo hacen porque piensan que molestan a los demás.
De ser así, como dije en otra viñeta, los niños no tienen la culpa de que cada vez haya menos parques infantiles para jugar. Ahora mismo no tanto, pero hace unos años había grúas construyendo pisos, casas...por todos lados. Sin embargo, pocas veces se preocupa la gente de construir espacios verdes para que tanto niños como adultos o ancianos puedan disfrutar jugando, charlando....
Los niños piensan quizás que los demás no los van a molestar porque es un coche el que está ocupando ese espacio de la calle y así pueden divertirse sin preocupaciones.

2.- La segunda posibilidad es que los niños estén escondidos porque nadie quiere que los vea jugando a papás y mamás o a las cocinitas.
Si es esta la situación me parece realmente triste porque volvemos a hablar de juegos y juguetes sexistas.
Si a un niño le gusta jugar con una niña o con otro niño a papás y mamás, a las cocinitas, a las compras o a lo que sea, ¿cuál es el problema?
El juego es un medio por el cual los niños aprenden cosas, se relacionan, expresan sus sentimientos, se divierten... ¿qué mas da si el juego son carreras de coches, las barbies o los peluqueros?
Algo que parece tan simple es tremendamente difícil de cambiar, debido a su gran tradición. Aún hoy en numerosas ocasiones se diferencian los juegos y juguetes para sexos.
Me llama bastante la atención cuando llega Noviembre y empiezan a echar en las casas las revistas de juguetes que los niños van a pedir para reyes. Todavía se colocan niños al lado de los coches, camiones, espadas...y niñas al lado de las cocinitas, las barbies o el salón de belleza.
Algo tan simple como esto hace que demos patrones rígidos a los niños y niñas de los que temen salir.
Quizás por eso estos niños se esconden, porque tienen miedo que alguien les diga que los niños no juegan a esas cosas, que los niños y niñas juegan separados, que esos juegos son solamente de niñas, que son raros...
Como he dicho en bastantes ocasiones, el proceso de cambio es largo y duro, pero confío en que algún día se consiga finalmente y los niños y niñas puedan jugar libremente a lo que les plazca, que desde luego no hacen daño a nadie.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola a tod@s:
Hoy vamos a comentar lo que trabajamos en la clase de ayer.
La clase de ayer me encantó por el tema que tratamos: los valores que transmiten los juegos.
A veces no nos damos cuenta que los juegos transmiten una gran cantidad de valores, a veces buenos y otras veces no tanto.
Los niños reflejan en sus juegos las cosas que perciben del entorno. En clase se puso el ejemplo de los juguetes bélicos. Si los niños ven una y otra vez noticias sobre guerras, que sus padres y maestros hablan de esto... poco a poco lo reflejarán en su vida diaria.
Tendríamos que tener más claro que los niños a unas determinadas edades no deben escuchar o ver determinadas cosas. No se le debe comprar a un niño un videojuego en la que su única misión es matar a gente, o dejar a un niño viendo en el telediario cómo unos se matan a los otros en plena guerra.
Desgraciadamente, muchas veces no somos conscientes de esto. El resultado es que los niños, desde muy pequeños aprenden cosas que no son ni mucho menos beneficiosas para ellos.
Todos hemos jugado desde pequeños a polis y cacos o cosas parecidas, pero de ahí a que los niños sólo jueguen a matarse los unos a los otros, a decir frases típicas de gente mayor, a tener "miedo" a gente de otras culturas porque sus papás dicen que son "malos"..., hay un gran paso.
En clase comenté lo que me pasó con mi primo pequeño hace unas semanas. Estaba jugando con él mientras los mayores hablaban del conflicto en Libia, de Egipto y demás revueltas. Hubo un momento en el que me dijo que un niño marroquí había entrado en su clase y que a él le daba mucho miedo porque les podía hacer mucho daño.
Tuve que ponerme un gran rato con él para explicarle que no tenía que tener miedo a ese niño, que había gente mala en todo el mundo y que todas las personas de esos países no eran malas, que había mucha gente buena y alguna mala, al igual que pasa aquí.
El caso es que su temor viene de ver una y otra vez imágenes en todo tipo de programas de televisión, que por alguna extraña razón no están señalados para unas determinadas edades.
Pero los juguetes o videojuegos no sólo transmiten esto sino también otro tipo de valores como el sexismo.
En clase se enseñaron distintos tipos de Barbies. Todas eran la barbie veterinaria, la peluquera, la maquilladora, la profesora... Ninguna era la policía, la ejecutiva, la empresaria, la bombera o la arquitecta.
Como dije el otro día con las páginas web, las mujeres seguimos estando definidas en unos patrones claros y es muy difícil sacarnos de ahí.
Confío en que algún día se consiga, pero el camino es todavía largo.
En fin, lo que he querido expresar con esta entrada es que los juegos y videojuegos tienen una gran cantidad de ventajas, pero también pueden tener muchas desventajas si no son adecuados a una determinada edad.
Si a un chico de 15 años se le muestra un videojuego bélico no tiene por qué pasar nada, al igual que si a una chica de la misma edad se le dan todo tipo de Barbies. Tanto uno como el otro tienen un cierto grado de madurez para valorar que el videojuego es ficticio, que él no tiene por qué matar a nadie. La chica por su parte entenderá que se pueden tener otras motivaciones diferentes a maquillar, peinar o enseñar a la gente.

¿Qué opináis vosotr@s?

Hola a tod@s:
Hoy vamos a comentar la viñeta nº 14 de este extenso bloque:

Como se puede apreciar en la viñeta, un niño llega dos horas tarde al colegio. Su maestro le recrimina la tardanza y él le pide disculpas, alegando que estaba recuperando las horas que perdió el día anterior haciendo deberes.
Esta imagen es un claro reflejo de la realidad que se vive en muchos colegios.
Hay maestros y maestras empeñados en poner deberes y más deberes a los niños. A unas edades determinadas no me parece mal que haya una cantidad razonable de deberes, ya que son una parte de su formación. Si no se mandaran ningunos deberes, lo que se explica en clase se olvidaría o no se reforzaría en muchas ocasiones. Pero en educación infantil, ¿tienen algún tipo de sentido los deberes?
Cuando los niños de infantil van a la escuela aprenden poco a poco determinadas cosas, cada vez son más independientes, conocen más cosas de su entorno.
Todas estas cosas se irán poniendo en práctica en su vida diaria. Si se le enseñan a los niños los colores, los números, las vocales..., irán reforzando su aprendizaje cuando vean números en la tele o en un juego, cuando vean un semáforo, cuando vean las letras de un cuento....
Pero, ¿qué sentido tienen los deberes a esta edad? En mi opinión, ninguna.
No sólo no tienen poca utilidad, sino que quitamos cosas muy importantes a estas edades: los juegos, los paseos con sus padres...
En la imagen se ve claramente: el niño no pudo jugar la tarde anterior porque estuvo haciendo deberes ¡2 horas!
En fin, en mi opinión esto es una de las muchas barbaridades que se comenten en la enseñanza de infantil como el poner a los niños 3 horas a hacer fichas.
Quizás a estos maestr@s no les han enseñado en la facultad que la enseñanza en infantil es completamente distinta al resto de enseñazas de cursos posteriores.

¿Qué opináis vosotr@s?

Atención a la página que me he encontrado en internet.
Para que luego se diga que la igualdad se ha alcanzado.

http://www.pequejuegos.com/

Cuando te metes en la página no parece haber nada extraño. Hay un montón de juegos para que los niños pasen un rato, pero atención a las categorías en que están clasificados los juegos: infantiles, habilidad, lógica, acción, ¿niñas?
Primer error: ¿por qué hay una sola categoría para las niñas?, ¿es que a las niñas no les gustan los juegos de lógica, acción...?
Si le damos a juegos para niñas, atención lo que nos sale: juegos de vestir, de maquillar, de cocina, de peluquería, de decorar, de amor, de baile y de mascotas.

Sí señor, a las mujeres o niñas sólo les interesa esto. Si una hija suya se sale de aquí, preocúpese y mucho.
Si a su hija no le gusta maquillar a Angeline Jolie o vestir a la princesa Kate para su boda...tiene un problema serio.
El resto de categorías (que no son de niñas), ¿son de niños o de seres indefinidos?
Lo que está claro es que seguimos tratando a las mujeres como personas a las que sólo les interesa maquillarse, peinarse, ver programas de cotilleo y poco más.

Aquí otra maravillosa página en la que también se hace distinción entre juegos de niñas y de niños
http://www.bjuegos.com/

Mal vamos, muy mal, si seguimos permitiendo que pasen este tipo de cosas.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola chic@s:
Vamos a comentar lo que hemos hecho en las clases de hoy.
La clase teórica me ha gustado mucho porque hemos tratado un tema que me parece muy interesante: los valores y antivalores de los juegos y danzas.
Está claro que jugar es muy bueno para los niños y que a casi todos los niños les encanta jugar. Lo que quizás no tengamos tan claro es que los juegos también transmiten valores, tanto buenos como malos.
En la clase práctica nos hemos encontrado varios ejemplos de antivalores que se transmiten, por ejemplo, en las canciones.
En algunas canciones se incitaba a la violencia, ya fuese doméstica o de cualquier otro tipo, se hacía referencia al racismo, a la discriminzación cultural...(matar a tu mujer, el rey moro mató a no se quién, las niñas bonitas no pagan dinero, un hombre con 20 novias...)
También hay multitud de juegos que transmiten valores muy positivos como la libertad, la cooperación entre los niños, la ayuda que se dan unos a otros, la inclusión de niños de otras culturas o razas...
Lo que está claro es que a la hora de enseñar juegos o danzas a los niños los maestros deben tener muy claro si esos juegos son beneficiosos o todo lo contrario.
Nosotros deberíamos ser los primeros en rechazar danzas o canciones que contienen multitud de antivalores (como las que hemos visto hoy), juegos que incitan claramente a la violencia, a la discriminación, al sexismo...
Con respecto al sexismo, creo que en la época que vivimos no se puede consentir que siga habiendo juegos para niños y juegos para niñas. No se puede estar todo el día diciendo que las barbies son de niñas y los coches de niños, que si una niña juega con los playmobil es rarita y si el niño juega a las barbies o se le ocurre llorar es más rarito todavía.
Los antivalores de los juegos y danzas han sido una de las cosas que más me han sorprendido. Las canciones de la clase práctica las había cantado casi todas, si no todas.
Cuando eres pequeñas cantas las canciones o juegas a determinadas cosas sin más. No te preocupas de lo que se transmite o si la canción dice cosas buenas o no, simplemente juegas o cantas.
Pero también está claro que poco a poco esas canciones o juegos van influyendo en el pensamiento de los niños, en sus ideas y formas de pensar.
Por todo esto es fundamental que seleccionemos las cosas que queremos enseñar a los niños.
Entre todos podemos cambiar poco a poco, generación a generación, cosas que aún hoy en día hacen mucho daño.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola a tod@s:
Hoy vamos a comentar la viñeta 13 de este bloque.

En la siguiente imagen se puede ver a unos niños jugando con una pelota. Nada extraño si no fuera por el cartel que tienen a su lado: perdonen las molestias, estamos jugando para ustedes.
Cuando he visto esta viñeta me he preguntado: ¿es que ahora los niños van a tener que pedir permiso para poder jugar?
Todos hemos sido pequeños y hemos jugado en la calle de nuestra casa, en la plaza, en el parque...
Está claro que cuando juegas con algunas cosas, pelotas sobre todo, puedes darle sin querer a alguien. Pero creo que eso entra dentro de la más absoluta normalidad.
Lo que no me parece normal es que unos niños tengan que pedir permiso para hacer algo tan fundamental a su edad como es jugar.
Cuando uno tiene 15 o 20 años no se va a poner a jugar en cualquier lado, más que nada porque a lo único que se suele jugar es al fútbol, al baloncesto o derivados. No he visto a mucha gente de esa edad jugando a las palmas o a saltar a la comba, y más en la era de la tecnología en que nos movemos.
Pero cuando uno es niño se juega a todo y durante bastante tiempo. Muchas veces se va a un parque, pero si por algún motivo no se puede se juega en la calle con tus vecinos.
Evidentemente los niños deben jugar en sitios seguros: no pueden tener una carretera transitada por un montón de coches porque lo más probable es que, antes o después, tengan algún incidente por cualquier despiste.
Pero si se tienen las medidas oportunas, ¿cuál es el problema?
El problema es que hay gente que se molesta por todo, que le molesta que un niño chille o cante o esté jugando al balón.
A esta gente le diría que los niños no tienen ninguna culpa de que algunos pueblos o ciudades prefieran construir montones de casa y pocos parques, porque la verdad es que en muchos pueblos sucede esto.
Si nos quejamos tanto de que los niños molestan, llevémoslos a sitios especializados para que los niños jueguen.
Lo que no se puede hacer es tener a un niño toda la tarde: no chilles, no cantes tan fuerte, ten cuidado con la pelota, no le des a la comba tan fuerte...
Al fin y al cabo, los niños cuando son tan pequeños no entienden demasiado que puedan estar molestando a los demás. Ellos simplemente se expresan libremente, se divierten con sus normas...
Ya tendrán tiempo cuando sean mayores para que el vecino de enfrente les regañe por tener la música alta o el conductor de al lado les pite y les diga de todo porque han arrancado 2 segundos después de que el semáforo estuviese en verde.

¿Qué pensáis vosotr@s?

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola a tod@s:
Hoy vamos a comentar lo que hicimos en la clase de ayer.
En esta clase estuvimos explicando distintas cosas en relación a habilidades que los niños deben aprender.
Se nos explicó que había distintas clases de habilidades: básicas, fundamentales, especializadas...
Es muy importante que al niño se le creen desde el principio unos cimientos básicos, ya que si no cuando sea mayor le costará aprender mucho, o más de lo que debería, determinadas cosas.
Si no trabajamos cosas como andar, correr, lanzar, golpear, bailar, el equilibrio..., cuando el niño sea mayor y se le pida que aprenda un determinado baile o que aprenda a jugar al fútbol le costará muchísimo, y en muchas ocasiones se rendirá.
Todos estos aspectos son fundamentales en el desarrollo del niño y su vida posterior, y sin embargo, en muchas ocasiones no se le da prácticamente ninguna importancia.
He visto bastantes clases de infantil, y en muchas ocasiones se prefiere que el niño haga 4 fichas al día, ya que así los padres piensan que el niño está aprendiendo mucho.
El único rato en el que se mueven un poco es en los recreos, pero los niños están jugando libremente mientras las maestras están hablando entre sí, sin prestar demasiada atención a lo que los niños hacen.
No se trabajan en muchas ocasiones los aspectos motrices como tal. No se le dice al niño que van a aprender a tirar un balón o a golpearlo, sino que el niño lo aprende malamente de los demás.
La conclusión de esto, como he dicho antes, es que el niño cuando sea mayor tendrá bastantes problemas en cosas que no debería tener ningún tipo de dificultad.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola de nuevo:
Hoy vamos a comentar la viñeta nº 12 de este bloque.

Como se puede ver en la imagen, una madre le dice determinadas cosas a un niño y un maestro le dice otras al mismo niño.
Lo importante de esta imagen es que el maestro y la madre dicen cosas totalmente opuestas, con lo cual el niño no sabe qué debe hacer, qué es lo que está bien o mal...
Por una parte la madre le dice que no se ensucie, que ordene, que no sude demasiado...Por otra, el maestro le dice todo lo contrario: que se manche las manos para pintar, que corra, le da muchos juguetes...
Esto es un gran problema que en muchas ocasiones está presente en las aulas: Diferencia de criterios padres-maestro.
Lo malo es que el gran perjudicado de esta situación es el alumno/a.
En mi opinión, a la hora de empezar a trabajar con un niño es muy importante, fundamental que hablemos primero con la familia.
La escuela no debería estar aislada de la familia. La labor de educar y enseñar debería ser conjunta.
Es por eso, que antes de empezar a trabajar con el niño deberíamos preguntar a los padres cómo es el niño, la manera en que le enseñan determinadas cosas, las normas que ponen, la disciplina que utilizan, las cosas que dejan o no hacer al niño...
Si unos padres no quieren que un niño haga determinadas cosas, el maestro/a debería saberlo y llegar a un acuerdo.
Lo que no se puede hacer es decirle a un niño en casa que no corra mucho porque suda, y en clase decirle que tiene que correr más, porque el niño se vuelve loco como poco.
En resumen, creo que la escuela y la familia deben trabajar conjuntamente y llegar a un acuerdo en relación a la educación de su hijo/a. A la hora de tomar decisiones debemos procurar que las cosas que se digan en la escuela se cumplan en casa y viceversa. Así el niño podrá establecer unas normas de comportamiento, de las cosas que casi siempre puede hacer o las que nunca debe hacer...

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola a tod@s:
Hoy vamos a comentar lo que hicimos en las clases del miércoles.
En estas clases estuvimos trabajando con la programación que se nos dio antes de Semana Santa.
En la clase teórica, los diferentes grupos estuvimos presentando nuestra crítica a la programación.
La conclusión a la que llegamos todos es que la programación presentaba bastantes errores y que las actividades que presentaban eran como poco muy pobres.
Estas actividades me parecen importantes, ya que vamos desarrollando nuestro pensamiento crítico. Además, como futuras maestras de infantil vamos a tener que hacer programaciones. Haciendo este tipo de actividades sabremos lo que tenemos y no tenemos que hacer, cómo tenemos que preparar una programación, qué actividades debemos incluir...
En la clase práctica estuvimos realizando las actividades complementarias que cada grupo trajo.
Al igual que dije antes, el que nosotras tengamos que pensar e inventar actividades para que los niños trabajen un determinado tema me parece fundamental a la hora de nuestra futura profesión.
Además, cada grupo trajo distintas actividades y entre todas pudimos aprender muchas actividades para un mismo tema.
Al acabar la clase la profesora nos estuvo diciendo las cosas que estaban bien y las que había que mejorar.
En resumen, la clase práctica de hoy ha sido un poco diferente a las anteriores, pero me ha gustado mucho por el hecho de que la clase se ha desarrollado con cosas que habíamos tenido que preparar nosotros.

¿Qué pensás vosotr@s?

Hola a tod@s:
Hoy vamos a comentar la viñeta nº 11 de este bloque.

Como se puede observar en la imagen, unos niños están con el ordenador y con auriculares, al igual que hace su maestra.
Esta viñeta hace referencia a la introducción de las nuevas tecnologías en las aulas.
En mi opinión, las nuevas tecnologías tienen una gran cantidad de ventajas y estoy totalmente de acuerdo en que se introduzcan en las clases, ya sea de infantil, primaria...
Pero hay que saber introducirlas y utilizarlas, porque si no nos podemos encontrar con más desventajas que ventajas.
En una clase de infantil las nuevas tecnologías podrían servir para muchas cosas: que los niños jugaran en determinadas ocasiones, que se les pueda enseñar determinadas cosas, como fotos, para que entendieran mejor las cosas que les estamos diciendo...
Pero de ahí a tener a los niños con la maquinita y con los auriculares aislados hay un gran paso.
Si en el aula de infantil utilizamos sólo los ordenadores, y lo hacemos de manera que los niños se aíslen, esto supondrá un gran problema. Uno de los aspectos más importantes de la educación infantil debería ser el de la socialización, que los niños aprendan a convivir con los demás, a expresar sus sentimientos y opiniones, que conozcan el mundo que los rodea y a sí mismos...
Si en vez de hacer esto, tenemos al niño/a todo el día enganchado al ordenador, ¿dónde dejamos el papel socializador de la escuela?
Otra cosa que se ve muy perjudicada es la relación maestro-alumnos. A estas edades, los maestros son una figura muy importante para los niños. Si su maestro hace una cosa, ellos la repetirán.
Si el maestro está todo el día enganchado al ordenador, los niños lo imitarán. Además el maestro no podrá conocer en profundidad a sus alumnos, no podrá saber si avanzan correctamente, si tienen algún problema, si se sienten bien o mal...
En resumen, creo que las nuevas tecnologías están a la orden del día, le pese a quien le pese, y por lo tanto estoy a favor que se introduzcan en las aulas, siempre y cuando se utilicen de manera adecuada y favorezcan el desarrollo y aprendizaje de los niños/as.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola tod@s:
Aquí os dejo dos propuestas para trabajar el esquema corporal en educación infantil.
Si le damos movimientos sencillos, los niños podrán aprender a utilizar distintas partes del cuerpo a la vez que se divierten.

Hola chic@s:
Vamos a comentar la 10ª viñeta de este bloque.

En esta imagen, se puede ver a un maestro/a examinando a un niño de infantil. El maestro le dice al niño que levante la mano zurda. El niño, con cara de susto, no sabe lo que le están preguntando: ni sabe lo que significa elevar, ni zurda.
Acto seguido, el maestro dice que el niño tiene un retraso grave y que hay que mandarlo a la clase de educación especial.
Viendo esta imagen, lo primero que pensé fue que al que había que mandar a clases de educación especial es al maestro: por su forma de evaluar, por el vocabulario que utiliza y por lo poco que parecen interesarle sus alumnos.
Para empezar, creo que a los niños de infantil no se los puede evaluar como a los niños más mayores.
Podemos ir fijándonos en las cosas que sabe o no hacer cuando está con sus compañeros, cuando no se siente tan observado.
Si necesitamos medir alguna actividad y no lo podemos hacer en grupo, lo menos que debemos hacer es tratar al niño con cariño, que él no se de cuenta que lo estamos examinando. Ya habrá tiempo para eso es los múltiples cursos posteriores.
En este caso, podríamos haber dicho al niño que íbamos a hacer una actividad y que tenía que seguir unos ciertos pasos. Le podríamos haber dicho: Pepito, a ver, tienes que levantar la mano izquierda. Creo que este vocabulario es bastante más comprensible para él que elevar y zurda, ya que son términos poco familiares para él.
Por otra parte, podría darse el caso de que algún niño tuviera dificultades para realizar determinadas actividades, pero no creo que deba mandarse a un niño/a a clases de educación especial a la ligera.
En el caso de encontrarnos a un niño con dificultades continuas para realizar actividades lo primero que deberíamos hacer es llamar a los padres, que nos cuenten si tiene dificultades para hacer cosas en casa, si solo pasa esto en el colegio...
Cuando la situación esté bien analizada, es entonces cuando podremos decir si un niño necesita refuerzo o no.
Si lo necesita, no pasa nada, pero debemos tener claro qué refuerzos necesita, en qué actividades...
De hacerlo así, probablemente estemos ayudando bastante a la autoestima de "Pepito", y no colocarle el cartel de "tonto" por no saber elevar la mano zurda.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola chic@s:
Hoy vamos a comentar lo que hicimos en las clases del miércoles.
Como la semana pasada, tuvimos doble sesión de teoría, lo que hizo el día un poco más pesado.
En la clase teórica, nos dividimos en grupos de 4 y estuvimos haciendo un análisis crítico de una programación relacionada con la motricidad infantil. Esta actividad nos viene muy bien, ya que es un tema que estamos tratando en otras asignaturas. También nos sirve para darnos cuenta que muchas programaciones no están del todo bien hechas, que tienen sus errores.
En la segunda hora teórica estuvimos viendo más cosas relacionadas con la motricidad infantil, las áreas que deben trabajarse...

La sesión práctica me gustó, pero menos que las anteriores. Estuvimos trabajando con el espacio y el tiempo. Hicimos una serie de ejercicios relacionados con la máquina del tiempo.
Lo primero que me gustaría comentar es la poca solidaridad que tenemos entre compañeras.
Lo primero que nos mandó hacer la maestra es construir nuestra propia máquina del tiempo. Acto seguido varios grupos se hicieron de un montón de materiales, no teniendo en cuenta en ningún momento que allí éramos muchos grupos y que todos queríamos tener aros, globos...
Había grupos que tenía 10 globos, por lo menos, en su máquina. Cuando mi grupo fue a coger globos, solo había 2 o 3.
Me parece que no estamos en un concurso, y que deberíamos ser un poco más compañeras entre nosotras. El otro día, con el disfraz de los piratas, pasó exactamente lo mismo.
Si estuviésemos en un concurso lo entendería, pero en una clase de motricidad, donde se espera que aprendamos y que nos lo pasemos bien, no.
Con respecto a la clase, creo que las actividades salen mejor cuando somos menos personas, ya que somos muchos y se lía mucho follón.
También creo que, a veces, se hacen demasiadas actividades, y no hay casi tiempo de realizarlas, hay que ir continuamente con prisa.
Mi grupo fue el último o penúltimo en empezar a jugar. El primer ejercicio que nos tocó fue el de las siluetas de los pies. Como éramos los primeros, teníamos que dibujar y recortar un montón de siluetas, por lo que nos atrasamos mucho con respecto a los demás.
Otros grupos ya se encontraban con las siluetas, lo que adelantaba un montón la tarea.
Al final, me acuerdo que todos hacíamos los ejercicios con prisa, ya que la profesora nos dijo que la clase estaba terminando.
Lo que quiero decir con esto es que, por lo menos yo, prefiero hacer 4 o 5 ejercicios bien hechos, donde reflexione bien el valor que tienen, para qué sirven..., que hacer 8 donde los haces muchas veces sin pensar, porque no te da tiempo y al final acabas prácticamente agobiado y sin disfrutar de la clase.
Recuerdo que en algunos momentos de la clase, todos corríamos para coger una estación, porque todos estábamos ajustados de tiempo, sobre todo los que empezamos a jugar más tarde.

Hola a tod@s:
Hoy vamos a comentar la viñeta nº9 de este bloque.

Como se puede apreciar en la imagen, una maestro o maestro lleva a unos niños de infantil de excursión a visitar el barrio. La maestra dice continuamente a los niños que se suban a la acera, que se cojan de la mano, que no se suelten... Después la maestra/o le dice a los niños que cuando vuelvan a clase dibujarán lo que recuerden de la excursión. Una vez allí se ve que un niño empieza a dibujar el cogote de un compañero, que es lo único de lo que se acuerda.
Creo que es importante que cuando se lleva a los niños de excursión los maestros tengan claro el por qué los llevan, si es algo que va a llamar la atención de los niños...
Además, si una excursíón supone dar y dar normas a los niños, es mejor dejarlos en la clase.
Evidentemente, al ser tan pequeños, por su seguridad necesitan unas ciertas normas. Al pasar por una carretera, o por un sitio peligroso se deben coger de las manos y subirse a la acera.
Pero de ahí a tenerlos todo el día cogidos de la mano, de dos en dos y subidos a la acera hay un gran paso.
Si hacemos esto obtenemos el resultado que se ve en la imagen: el niño/a no se acuerda de nada de la excursión, porque se ha pasado todo el día viendo la espalda y cabeza de sus compañeros.
En esta visita al barrio, seguro que hay sitios que son poco peligrosos, alejados de la carretera. Ahí se podría haber dejado a los niños un poco de libertad, que hablaran con quien quisieran, que andaran más libremente...
Esta situación, como hemos comentado en otras viñetas, es un claro ejemplo de la realidad. A los niños se los tiene sobreprotegidos y esta sobreprotección no les ayuda en absoluto.
Aunque sean niños pequeños hay que dejarlos que poco a poco alcancen independencia. Si los tienes todo el día diciendo que esto no lo pueden hacer, que hagan las cosas así, que coman esto, que no coman lo otro..., van a alcanzar todo menos independencia, lo que traerá seguramente consecuencias negativas para su vida de adultos.

¿Qué pensáis vosotr@s?

Hola chic@s:
Hoy vamos a comentar lo que hicimos en la clase del viernes. En esta clase estuvimos comentando las observaciones que hicimos en los parque infantiles. Casi todos teníamos las mismas conclusiones: hay padres o abuelos que se preocupan demasiado por sus hijos, hay niños más independientes que otros, hay parques más seguros que otros...
También hemos podido darnos cuenta de las diferencias y similitudes con nosotros mismos. Recuerdo que cuando era pequeña mis padres me dejaban jugar de una manera más libre: no se pasaban todo el rato diciéndome que no me metiera las manos en la boca o que no tocara algo porque era caca.
Tampoco me parece normal que un padre o abuelo se meta en el juego del niño con los demás, que le diga cómo se tiene que jugar o los niños con los que debe o no jugar.
Haciendo todo esto estás haciendo del niño una persona totalmente dependiente, lo que luego podrá traer consecuencias malas como que el niño sea una persona totalmente insegura.

Hola chic@s:
Hoy vamos a comentar la octava viñeta del bloque 2 de la asignatura

En la siguiente imagen se puede ver a una niña jugando con una pelota. La niña está sola y se dedica a tirar la pelota una y otra vez a una pared.
Después, cuando llegan a clase, el maestro o la maestra les dice a los niños que escriban una carta un amigo suyo. La niña se pone a escribir y, curiosamente, le escribe la carta a la pared, como si de una amiga suya se tratase.
La situación de esta viñeta es para reflexionar: ¿la niña le escribe a la pared porque no tiene ningún amigo?, ¿realmente cree que la pared puede ser un amigo igual que cualquier otro niño?...
Yo creo que cuando los niños son tan pequeños tienen reglas distintas a las demás personas. Los niños tienen una cosa que, quizás, en los adultos escasea: la imaginación y fantasía.
A lo mejor la niña piensa que esa pared es su mejor amiga, como puede serlo su amigo Pepito o su amiga Luisita.
La niña se lo pasa bien jugando con la pelota en la pared, así que, aunque a los demás nos parezca extraño, para ella puede ser una amiga más.

Podría ocurrir también que la niña no tuviera mucha relación con sus compañeros y se haya inventado un amigo para no sentirse sola.
De ocurrir esto, creo que la maestra debería darse cuenta. La labor de un maestro/a de infantil no es solo enseñar a los niños conocimientos, sino tener en cuenta el desarrollo afectivo y social del niño, dado que son aspectos que luego repercutirán mucho en la vida posterior del niño.

En cualquier caso, la cara que tiene la niña al empezar a escribir a la pared no parece de tristeza. Si la niña piensa que es su amiga, no creo que se le tenga que recriminar nada. En todo caso habría que preguntarle por qué la pared es su amiga.

Vosotr@s, ¿Qué pensáis?